Como ciudadano
de un país democrático,
me solidarizo con una transición
pacífica a la democracia
en Cuba, protagonizada exclusivamente
por cubanos, como propone el programa
Todos
Cubanos y otros planes de transición,
para que sean liberados todos los
presos de conciencia, se respeten
los derechos humanos y los cubanos
gocen de libertades políticas
y económicas.
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