Mensaje a Orlando Zapata y familia desde prisión de Guanajay
Misceláneas de Cuba
Afirmamos esto porque las autoridades cubanas pudieron, sin costo alguno, acceder a las justas demandas del prisionero y evitar así que falleciera. Pero decidieron enviar un mensaje de terror a la oposición y a todo el pueblo, a la vez que ratifican su desprecio por la opinión pública nacional e internacional.
Hace más de treinta años, cuando “nadie escuchaba”, otro hombre joven, el exdirigente estudiantil universitario Pedro Luis Boitel, fue víctima de un crimen similar. Él ayer, y Zapata hoy -ante la hora suprema-, supieron morir en rebeldía contra la opresión. Ellos simbolizan lo mejor de nuestro espíritu de resistencia cívica frente al totalitarismo comunista.
La Historia los recogerá como mártires de la lucha pacífica por la democracia en Cuba.
Estamos convencidos de que la inmolación y el martirio de Zapata no será en vano, porque no existe mecanismo represivo capaz de matar un ejemplo como ése. Y su muerte física ya le cuesta al régimen mucho más que todas las penas de quienes estamos encarcelados.
Sirvan estas palabras como testimonio de admiración, tributo y agradecimiento por el poderoso ejemplo moral que, al precio de su vida, nos ha legado.
Y a sus familiares, en especial a Reyna Tamayo, su digna y valerosa madre, les enviamos nuestro más profundo sentimiento de solidaridad y pésame, en este momento de inconsolable dolor.
Cárcel de Guanajay, 27 de febrero de 2010.
Enlaces: Las Damas de Blanco
Autor: Misceláneas de Cuba/SEC