La opositora pacífica y presidenta de la Federación Latinoamericana de Mujeres Rurales (FLAMUR), Belinda Salas Tápanes, fue amenazada por la Seguridad del Estado en La Habana, el pasado 17 de noviembre, debido a su apoyo a la huelga de hambre que protagonizan varios presos políticos en Guantánamo.

Al abandonar la casa del ayuno, en la calle Bella # 61 entre Finlay y Cisneros Betancourt, del reparto Los Pinos, Belinda Salas resultó interceptada por el mayor de la policía política llamado Idalberto, quien le dijo a la pacífica opositora que de continuar en la abstinencia de alimentos sólidos no le darían el permiso de salida del país.

La presidenta nacional de la FLAMUR le contestó al oficial del Departamento de Enfrentamiento a la Actividad Subversiva Enemiga del Ministerio del Interior: “Yo apoyo a todo aquel que luche por la libertad y la democracia en mi patria, si no me dejan ir, arreciaré mi lucha con mucho orgullo”.

El compañero sentimental de Belinda, el ex – prisionero político Lázaro Alonso Román, quien fue la fuente de esta información, aclaró que en el momento de ser amenazada, él y otros cinco opositores acompañaban a Salas Tápanes y todos pudieron oír perfectamente el chantaje del funcionario represivo.

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Autor: Asociación Pro Libertad de Prensa / SEC