El Nuevo Herald
El cardenal Jaime Ortega espera la liberación de más disidentes presos tal como acordó con el gobierno y oficiará una misa de Navidad en una de las principales cárceles de la capital en la que se encuentran algunos ellos.

‘La esperanza lo incluye todo… hay una promesa formal (del gobierno) de que todos serán liberados’, dijo Ortega el lunes en la noche al concluir un concierto en la catedral de La Habana, en relación a la excarcelación de 11 opositores que restan de un lista de 52 liberaciones acordada con el gobierno.

Ortega no precisó la fecha en que estas personas saldrán a la calle.

‘No puedo hacer conjeturas. Repito lo mismo que he dicho desde hace meses, que hay una promesa formal de dejar en libertad a todos del grupo de los 52; ya salió uno de los que se queda en Cuba, espero que salgan los demás’, agregó el prelado.

Tras una reunión de Ortega con el presidente Raúl Castro en julio, el cardenal anunció la liberación de 52 presos políticos que quedaban en las cárceles de un total de 75 arrestados y condenados en el 2003.

La idea era que los disidentes podrían viajar a España en el lapso de cuatro meses que vencía -de manera no oficial, pues no hubo un convenio escrito- el 7 de noviembre. El entonces canciller ibérico Miguel Angel Moratinos participó del encuentro.

Cuarenta presos de la lista y otros que no se encontraban en el pedido inicial decidieron irse y fueron liberados paulatinamente para dirigirse a Madrid, pero 12 se negaron a hacerlo, alegando que querían permanecer en la isla.

Cuando llegó el plazo no se sabía qué decisión tomarían las autoridades, si dejarlos o no ir a sus casas o retenerlos. Sin embargo, a mediados del mes pasado las autoridades excarcelaron a Arnaldo Ramos Lauzurique, quien reside en La Habana y se quedó en la isla.

Desde entonces no se produjeron más liberaciones, por lo que se espera la salida de 11 presos próximamente. Varios de ellos están alojados en la prisión capitalina de Combinado del Este de La Habana.

Un comunicado del Arzobispado de La Habana el lunes por la mañana dio cuenta de la misa que se desarrollará en esa prisión el viernes 24 en la mañana, pero sin ofrecer detalles organizativos de la misma.

‘Todos los años celebro misa en alguna cárcel; este año será en el Combinado’, comentó el cardenal en sus declaraciones a periodistas tras el concierto en la catedral dedicado a la Navidad.

En la década de 1960, al triunfo de la revolución cubana la institución religiosa tuvo una mala relación con las autoridades, pero posteriormente reconoció las mejoras en los nexos. Pese a estos avances en el diálogo, la Iglesia católica ha reclamado sistemáticamente en estos años la posibilidad de realizar misas en las cárceles de manera habitual.

Otras demandas como la educación religiosa o el acceso sistemático a los medios de prensa -en ocasiones especiales se le permite a la Iglesia transmitir algunos mensajes- no fueron escuchadas.

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Autor: El Nuevo Herald