Amnistía Internacional (AI) revela en su informe anual que el gobierno cubano continúa encarcelando y acosando opositores, aunque señaló que las autoridades de la Isla se mostraron más abiertas a dialogar y firmar tratados internacionales de derechos humanos.

‘Las restricciones de la libertad de expresión, asociación y movimiento siguen siendo severas’, dijo la organización en su informe, divulgado en Londres.

‘El acoso a disidentes políticos, periodistas independientes y críticos por llevar adelante actividades disidentes o reportar sobre la situación de derechos humanos en Cuba, continuó’, añadió.

El documento de Amnistía menciona cuatro excarcelaciones de presos políticos en 2007 y la disposición de La Habana para cooperar con los mecanismos universales de derechos humanos.

‘El gobierno decidió discutir su expediente de derechos humanos con otros gobiernos y ratificar tratados internacionales’, dijo AI.

Amnistía consideró que hubo un cambio de actitud en Cuba en 2007, cuando el general Raúl Castro reemplazó de forma interina a su convaleciente hermano Fidel.

El gobierno de Cuba estableció en mayo del 2007 un mecanismo de diálogo político sobre derechos humanos con el de España.

En noviembre, La Habana recibió al relator de Naciones Unidas sobre el derecho a la alimentación, el suizo Jean Ziegler, reanudando la cooperación interrumpida más de dos décadas atrás.

Amnistía mencionó también el anuncio, en diciembre de 2007, de que Cuba firmaría un Convenio Internacional para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales y otro sobre Derechos Civiles y Políticos. Ambos fueron suscritos en febrero de este año en la ONU.

Aún así, Amnistía calcula que a fines de 2007 había en las cárceles de la Isla 62 presos de conciencia —encarcelados ‘por sus opiniones o actividades políticas no violentas’—, contra los 69 del año previo.

El informe denuncia que numerosas personas fueron condenadas por el delito de ‘peligrosidad social’, aplicado ‘de forma casi exclusiva’ a disidentes políticos, periodistas o críticos con el gobierno.

AI señaló que todos los medios de comunicación impresos y audiovisuales siguieron bajo control estatal, y que no fueron renovados los visados de varios corresponsales extranjeros por sus enfoques de la situación del país.

En su informe, Amnistía dijo además que los cubanos siguieron sufriendo las consecuencias del embargo económico aplicado desde hace más de 45 años por Estados Unidos.

‘Los efectos del embargo estadounidense han sido altamente perjudiciales para el ejercicio de derechos económicos, sociales y culturales, como los derechos a la alimentación, a la salud e higiene’, dijo AI.

Añadió que la política estadounidense socava la libertad de circulación entre Cuba y Estados Unidos y restringe las reunificaciones familiares.

Enlaces de interés:

Solidaridad Española con Cuba

Las Damas de Blanco

Viajes a Cuba

Autor: Cubanet